Fotografía: Yurema Frutos Ortega, junto a Francisco José Torres Gil, director territorial de Eurocaja Rural en la zona de Levante-sur

Eurocaja Rural ha abierto nueva oficina en Monóvar, ubicada en la comarca alicantina de Vinalopó Mitjà. La oficina, situada en la céntrica Avenida Puenteareas número 2, está operativa de 9 a 14 horas, y al frente de la misma se encuentra Yurema Frutos Ortega.

Desde este lunes 7 de octubre, la oficina ofrece todos los productos y servicios con la atención personalizada y el trato cercano y profesional que la caracterizan, centrado en la atención directa de los requerimientos de sus clientes.

Eurocaja Rural ha desarrollado un modelo híbrido en el que combina la presencia física de oficinas, la importancia del componente humano, con las tecnologías punteras para poder llegar a cualquier segmento de la población que así lo necesite.

Monóvar centra su actividad económica en el sector primario, concretamente en la producción de vinos, así como en la elaboración de calzado, muy importantes en el desarrollo de la zona. La cooperativa de crédito se asienta en esta localidad para ofrecer soporte financiero y social que permitan atender las necesidades del municipio.

Contraste Eurocaja Rural con resto sector financiero en la zona

La apertura de esta oficina es consecuencia del ambicioso Plan de Expansión que la cooperativa de crédito lleva acometiendo desde 2011, con motivo del cambio de su denominación social, y que llegó hasta la Comunidad Valenciana a finales de 2017. Desde entonces, Eurocaja Rural posee ya 26 oficinas en el territorio: 14 en Alicante, 11 en Valencia y una en Castellón de la Plana. Este hecho contribuye a generar actividad, riqueza y empleo, al igual que proporcionar soporte financiero al municipio.

En el último año y medio, Eurocaja Rural ha apostado por implantarse paulatinamente en numerosas localidades del territorio valenciano, en contraste al resto del sector financiero, que ha llevado a cabo un proceso de desapalancamiento y cierre masivo de la red comercial. Tanto es así, que se han reducido en ese periodo un total de casi 200 oficinas en el territorio.

Igualmente, según el informe de la primavera pasada del Banco de España, la Comunidad Valenciana contaba con 242 municipios sin oficina bancaria, lo que afectaba al 2,6% de la población. En contraposición, Eurocaja Rural es la única entidad financiera presente en prácticamente en medio centenar de localidades, lo que constata su apuesta contra la exclusión financiera y su implicación en la búsqueda de soluciones para el futuro de los pueblos de la España vaciada, para que cuenten con las mismas posibilidades que las áreas desarrolladas, al tiempo que se reconoce su potencial y su relevancia en el equilibrio cultural, económico y social.